04-08-2022 | di COOPI
Bolivia. Obtener energía a partir de residuos no reciclables
A partir de septiembre de 2019, COOPI - Cooperazione Internazionale ha implementado en Bolivia el proyecto "LaPazRecicla. Enfoque integral de la gestión de residuos en el Municipio de La Paz, Bolivia. Nuevas tecnologías para promover la economía circular", financiado por la Agencia Italiana de Cooperación al Desarrollo. El proyecto tiene la ambiciosa tarea de estudiar la calidad de los residuos desechados en la recolección diferenciada para cuantificar su potencial energético e iniciar así políticas nacionales de valorización energética de los residuos.
El proyecto fomenta la recolección diferenciada de residuos en la ciudad de La Paz, donde también hay una pequeña planta de clasificación que recibe los residuos clasificados por los ciudadanos. Sin embargo, el 40% de los residuos que llegan a la planta no pueden reciclarse en el país, que actualmente no está dotado de las tecnologías innovadoras para reciclar todos los residuos. Además, Bolivia aún no ha explorado la valorización energética de los residuos no reciclables. Así que, desafortunadamente, estos se envían directamente al vertedero, pero podrían ser un recurso utilizable para la recuperación de energía.
A través del proyecto, se llevó a cabo una amplia investigación que condujo a un estudio sobre el uso de los residuos para convertirlos en energía, el primero de este tipo en el país. La investigación también llevó a la creación de una guía directiva, que especifica la base técnica y científica necesaria para el uso de combustible de desecho a energía y define las precauciones que deben tomarse para un control medioambiental adecuado. En particular, se realizaron análisis para clasificar los residuos de combustible según las normas internacionales que discriminan su calidad y determinan su ámbito de aplicación. Esto fue posible gracias a la colaboración con la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz y la Universidad Insubria de Varese, ambas socias del proyecto.
Por ejemplo, la investigación ha permitido definir las características de los combustibles provenientes de los residuos que pueden utilizarse para la producción de cemento, favoreciendo así la reducción de los combustibles fósiles utilizados actualmente. Además, se ha investigado la posibilidad de utilizar materiales celulósicos de desecho, convertidos en pequeñas briquetas, para cocinar alimentos o para calentar viviendas en zonas rurales donde la madera o el estiércol son la única fuente de energía. También se está analizando la posibilidad de utilizar las briquetas en los numerosos hornos artesanales utilizados para la producción de artefactos como ladrillos, yeso y cerámica, que en la actualidad utilizan materiales de todo tipo, creando verdaderas emergencias medioambientales en determinadas zonas.
La acción de COOPI en este contexto está resultando esencial: Bolivia se enfrenta actualmente a una crisis provocada por el agotamiento de los depósitos de metano en los que ha basado su sistema energético y económico durante años. Sentar las bases de un futuro sostenible y respetuoso con el medio ambiente es la prioridad que hay que reconfirmar día a día.